25 Jul, 2023
Investigador de la UPAO afirma que la epigenética es determinante.
Importante
aporte a la academia. Tras culminar una acuciosa investigación, el doctor Juan
Namoc, catedrático de la Universidad Privada Antenor Orrego (UPAO), determinó
que la conducta criminal del ser humano se debe a factores genéticos y el
contexto en el que se desarrolla.
El destacado
médico pediatra añadió que el cerebro tiene trillones de conexiones de cables,
de axones, de dendritas que van formando fascículos ultraselectivos, unidos
cuánticamente, los cuales deben enlazarse correctamente; a esto se le conoce
como sinapsis. Entonces, los que fallan son estos fascículos y los neurotransmisores
que se liberan en estas conexiones; a este proceso se le denomina conectoma
cerebral.
“Un niño puede
tener genes criminales y se manifiestan en su conducta violenta; por ejemplo,
golpea a los animales, rompe las cosas, no tiene miedo a las arañas y se orina
en las noches en la cama; esos son indicios de que no está bien y necesita de
la asistencia psicológica. Además, si carece de afecto y sufre violencia
familiar, esta conducta se va a acentuar hasta llegar a acciones criminales”,
añade.
Sin embargo, según
el investigador, si este mismo niño con genes criminales crece en una familia
muy amorosa, en un clima de respecto, tolerancia y valores, esa semilla de la
criminalidad no germinará y se desenvolverá como una persona normal. A esto conocemos
como el entorno es la epigenética.
“La presente
investigación me motivó, tras preguntarme cuál es la diferencia entre el
cerebro de Cristo, Hitler, Gandhi, Julio César, Calígula y Nerón, entre otros.
La respuesta está en el interior del cerebro de cada uno de estos personajes”, concluyó Namoc Medina. (APB-PRENSA UPAO)